Las habilidades sociales son muy importantes en el plano laboral, sino también en el personal. Conocer algunas de ellas nos permitirá explorar nuestras capacidades para llevarlas a la práctica.
Estas habilidades se desprenden de un concepto muy importante: Inteligencia Emocional. Nuestra inteligencia emocional es la que nos permitirá conocer nuestro potencial y nuestra capacidad para aprender estas habilidades prácticas en las que haremos mención en el siguiente artículo.
Qué son las habilidades sociales
La habilidad social es una serie de patrones conductuales que resultan ser necesarios para poder relacionarnos con nuestro entorno de una manera más eficaz. Es nuestra capacidad de inducir respuestas deseables en las personas que nos rodean.
Esta serie de conductas se van aprendiendo a lo largo de nuestras vidas, lo que quiere decir que no son innatas al ser humano y que, por tanto, cambian dependiendo del lugar en el que estemos o de la cultura ante la que nos encontremos se van adquiriendo porque es del orden de lo aprendido, aquello que vamos asimilando e incorporando.
Tipos de habilidades sociales
Existen dos tipos de habilidades sociales: las habilidades básicas, y las habilidades complejas.
Las habilidades básicas son, como su propio nombre indica, un conjunto de conductas que constituyen la base primaria del resto de comportamientos que resultan ser más complejos.
Ello quiere decir que, si no tenemos unas aptitudes sociales básicas determinadas, nos será muy difícil poder alcanzar las complejas. Para poder entender mejor este concepto, hay que ver de qué tipo de conductas estamos hablando.
Habilidades sociales básicas
1. Escuchar
Saber escuchar es una habilidad importante, ya que es una manera efectiva de comunicarnos con nuestro entorno. Si no sabemos escuchar nos resultará complejo establecer un buen diálogo. Pon atención a las personas que están hablando contigo.
2. Agradecer
Saber agradecer las cosas es una de las habilidades básicas que todo el mundo debería implementar a su vida, ya qu este estado de gratitud conecta con la energía del bienestar y nos ayuda a enfocarnos en todo lo bueno que sucede a nuestro alrededor.
3. Perdonar
Saber perdonar es una de las aptitudes que más tenemos que tener en cuenta. Esta, al igual que la anterior, también resulta bastante ausente en la mayoría de las personas. Aprender a identificar las situaciones que requieren una visión mas comprensiva implica perdonar a la otra persona y sobre todo a perdonarnos a nosotros mismos por priorizar conductas que sabemos que no nos hacen bien, por ejemplo el orgullo o el resentimiento que generalmente suelen desprenderse de la incapacidad de perdonar.
4. Conversar
Iniciar una conversación y mantenerla son dos acciones que conforman esta habilidad. Iniciar una conversación es algo que debe aprenderse, y muchas veces puede producir ansiedad o miedo frente a personas o situaciones que nos provocan inseguridad.
Pero es una de las habilidades sociales básicas que más nos ayudarán a transmitir confianza y nuestros deseos a través del lenguaje. La comunicación que desencadena en diálogos y conversaciones, son fundamentales a la hora de vincularnos efectivamente.
5. Preguntar
Saber preguntar no solamente consiste en plantear un interrogante, sino que debemos saber de que modo preguntar exactamente para conseguir lo que queremos, cómo debemos formular nuestra pregunta implica un claro reconocimiento de lo que deseamos saber y trasmitir, sobre todo poder reconocer cuándo es el mejor momento para preguntar acerca de un determinado tema. Trabajar esta habilidad social puede proporcionarnos éxito en planos afectivos y laborales.
6. Saber presentarse
Para conocer a gente nueva y relacionarnos eficazmente con el resto, esta es una de las aptitudes que debemos tener muy presente.
7. Saber despedirse
De la misma manera que tenemos que saber cómo presentarnos, también debemos saber cómo despedirnos y reconocer cuándo es el mejor momento para hacerlo. Tener inseguridad en este tema puede implicar que prolonguemos momentos y conversaciones que nos ponen nerviosos, o que nos incomodan. De la misma manera, saber despedirse adecuadamente permitirá cerrar el diálogo de la mejor manera.
8. Ser cortés
Ser cortés es igual a ser educado. Esta habilidad es extremadamente importante, puesto que nos permite actuar con responsabilidad y respeto por la conversación y por las personas involucradas en la misma.
9. Elogiar
Elogiar es una de las habilidades sociales que debemos aprender para relacionarnos satisfactoriamente con el resto de personas. No debe darnos ningún tipo de reparo reconocer los logros y las virtudes del resto de personas. Esto nos dará un plus de amabilidad y reconocimiento por los logros de las personas que nos rodean y una sensación de bienestar y gratificación por el estado de felicidad por las metas alcanzadas de quienes nos rodean.
10. Empatizar
Saber empatizar con nuestro entorno hará que podamos comprenderlo mejor y avanzar en él. Empatizar implica reconocer las emociones del otro, poder ponerme en el lugar del otro y desde allí entender su perspectiva y sus emociones. Esta habilidad nos permite profundizar en las personas que nos rodean y reflexionar sobre como se sienten en lugar de juzgarlas.
11. Respetar
No saber respetar a la gente no solo hará que fracasemos en cuanto a nuestras metas, sino en absolutamente cualquier aspecto personal de nuestra vida. Adquirir esta aptitud es algo muy importante. Implica reconocer nuestros límites y respetar los límites ajenos también.
12. Tener confianza
No se trata de confiar en el resto, sino en transmitir confianza a los diferentes integrantes de nuestro entorno social. Es una de las habilidades que más importan a la hora de tener éxito. Para lograrlo primero debo tener confianza en mí para luego trasmitirla al medio que nos rodea.
13. Ser asertivo/a
La asertividad es la capacidad que tenemos de expresar nuestras opiniones sin tener una incidencia negativa en el resto. Por ello, la asertividad es tan importante. La asertividad nos facilita el camino de las relaciones personales y nos da una ventaja con respecto al resto de personas.
Una persona asertiva puede comunicarse de manera clara en cuanto a sus deseos y conductas porque posee la plena claridad de lo que espera para su vida.
14. Tener la mente abierta
Tener una mente abierta es importante, y es la base de poder empatizar con la gente y de ser una persona más asertiva. Esta habilidad va de la mano de el concepto de flexibilidad, ya que todo es permanente cambio y lo mas apropiado para movernos en él e ir aprendiendo diferentes cosas es a través de una mente abierta a lo nuevo y a diferentes posibilidades.
15. Saber explicar
Saber explicar nuestras emociones, nuestros planes, nuestros conocimientos, y hablar con propiedad, es una habilidad que nos dará una mayor aceptación. Además, este punto es clave en la asertividad, ya que no podremos explicar nuestra opinión correctamente si no sabemos cómo hacerlo.
Ejercicios para mejorar la habilidad social
1. Deja a un lado el egoísmo extremo
Tienes que aprender que el resto también tiene sentimientos y emociones, y que merecen la misma atención que tú te das a ti mismo. No podemos prosperar ni tener buenas habilidades sociales si somos incapaces de dejar a un lado el interés extremo por nuestra propia piel.
2. Muestra interés y escucha
De esta manera, debes mostrar interés en las personas que te rodean y, sobre todo, aprender a escuchar. En este punto es claro saber que la atención que me gustaría que me presten, es la que debo dar. El otro debe ser respetado y escuchado como gustaría que lo hagan con uno mismo.
3. Comunicación
Emite mensajes claros y convincentes.
4. Reconocimiento
Reflexionar y reconocer siendo sinceros, sobre aquellos puntos fuertes que poseemos y nuestras debilidades.