Coulrofobia o miedo a los payasos

Los payasos fueron ideados para divertirnos. Durante nuestra infancia, seguramente nos sacaron más de una carcajada a muchos. Digo muchos y no todos porque hay un porcentaje de la población mundial a la que no le parecen para nada divertidos los payasos. Estas personas sufren lo que se conoce como coulrofobia, un miedo irracional hacia los payasos que puede convertir una visita al circo en una experiencia verdaderamente traumática y aterradora.(1)

La fobia a los payasos no es muy diferente a las demás fobias. Son miedos irracionales que generan repercusiones relacionadas con el miedo en nuestro organismo. Para una persona que padezca coulrofobia puede ser mucho más aterradora la película “It” de lo que ya fue para todos los demás que no sufren esta fobia.

Si no me gustan los payasos, ¿tengo coulrofobia ?

Somos conscientes de que a todo el mundo no les agradan los payasos. De hecho, puede haber personas a las que, en lugar de darles risa, les generan desagrado. Pero esas personas no entran en el grupo selecto de los coulrofóbicos. Está formado por aquellos individuos que cuando están frente a uno de estos personajes se quedan paralizados, gritan de terror o salen corriendo sin pensar a dónde van; solo desean alejarse del payaso de cualquier forma para sentirse tranquilos.

No todas las personas reaccionan igual ante un payaso ya que existen distintos niveles de intensidad. Es por eso que hay individuos que pueden estar aterrados, pero aun así tratan de controlar sus emociones. Sin embargo, hay otras a las que les resulta inevitable exteriorizar su sensación de pánico cuando tienen un payaso en frente, lo ven en una película de terror o incluso en una simple fotografía.

En Estados Unidos se inició una tendencia en la que un grupo de personas se disfrazaban de payasos y salían a la calle a ver a cuantas personas asustaban. El fenómeno se extendió hasta por 20 estados del país y sirvió para percatarnos de que hay muchas más personas con miedo a los payasos de las que pensábamos.

Pero ¿por qué dan miedo los payasos? Como en todas las demás fobias, su origen es un poco incierto. Todo lo que se conoce alrededor de este tema son simples teorías. No lo es así el miedo a los payasos, ya que es un trastorno probado que genera síntomas identificables en los que padecen esta condición.

Síntomas de la coulrofobia

Los síntomas de la coulrofobia son idénticos a las de otras fobias conocidas como la aracnofobia o la acrofobia.(2) En los pacientes con esta condición podemos identificar síntomas como:

  • Pánico generalizado: las personas con fobia a los payasos serán invadidas por el pánico. Hay varios niveles de pánico y la reacción va a depender del autocontrol que tenga la persona. Es por ello por lo que podemos quedarnos totalmente paralizados o salir corriendo descontroladamente con el único objetivo de alejarnos del personaje.
  • Temblores: cuando el pánico invade nuestro cuerpo este se descompensa, perdemos el control de modo que es muy fácil comenzar a temblar como si estuviéramos a punto de sufrir un colapso nervioso, hecho que se puede producir si la fobia es demasiado fuerte.
  • Ansiedad: la ansiedad estará presente en cada momento que pasemos frente al payaso e incluso cuando nos hayamos alejado de él. Es posible que este síntoma se mantenga durante un par de días después de tener un encuentro directo con uno de estos personajes.
  • Taquicardia: como resultado de la ansiedad, nuestro ritmo cardíaco se acelera. Un síntoma que también se mantendrá incluso unos minutos después de haber dejado de tener contacto con un payaso.

Miedo a los payasos

Podemos identificar otros síntomas, pero estos varían según los mecanismos de defensa de cada persona. Hay personas que para sentirse protegidos concentran todo su peso en su centro de gravedad, agachándose o colocándose en posición fetal. Del mismo modo, también podemos identificar pacientes que sufren problemas intestinales.

Causas del miedo a los payasos

Hasta ahora no se puede asegurar cual es el causante real del miedo a los payasos. Sin embargo, los investigadores y expertos en el tema han tratado de descifrarlo y hasta ahora se tienen las siguientes teorías.

Disonancia cognitiva

Este fenómeno fue expuesto por Freud. Lo que el psicólogo explicaba era que cualquier cosa que nos resulta familiar, pero al mismo tiempo extraña, puede causar en nosotros una sensación de inquietud e incluso miedo. Cuando el cerebro no tiene claro lo que expresa algo o alguien, tiende a desconfiar y esa desconfianza puede expresarse en miedo.

Los payasos generan disonancia cognitiva por su maquillaje.(2) Una sonrisa nunca puede ser eterna y los payasos siempre la llevan puesta. Es por ello que nuestro cerebro desconfía ya que, a pesar de la gran sonrisa, no tiene claro cuáles son las intenciones reales de ese personaje en cuestión. Por esa razón en los circos modernos podemos apreciar payasos que utilizan menos maquillaje que los payasos clásicos que estábamos acostumbrados a ver.

Sin embargo, si este fuera el motivo real por el cual los payasos dan miedo, indicaría que todos tenemos miedo a los payasos a causa de su maquillaje. Es ahí donde radican las principales críticas a la teoría y algunos no le dan el crédito suficiente como para aceptarla como una causa probada de la fobia a los payasos.

Los estímulos sociales

¿Viste la película It? Pues ahí está la base de esta teoría. Los medios de comunicación han utilizado ingeniosamente la imagen de los payasos para crear tramas aterradoras y muchas de ellas relacionan a los payasos no solo con el terror, sino también con la pedofilia y otros tabúes sociales muy arraigados.

Una persona sensible puede verse afectada por todas estas tendencias y desarrollar en su mente miedo irracional hacia los payasos por el simple hecho de que los medios los muestran como algo maléfico. Aunque no solo la televisión se ha encargado de crear una imagen negativa en torno a estos personajes.

Miedo a los payasos

Entre 1972 y 1978, USA se vio sumergida en una ola de 33 asesinatos en serie de lo más descabellado. Todas las víctimas eran hombres jóvenes que habían sido violados y brutalmente asesinados ¿El causante? John Wayne Gacy, conocido también como “el payaso asesino”. Este hombre fue el primero en demonizar la figura de los payasos en el mundo y, de hecho, inspiró películas de terror. 29 de sus víctimas fueron enterradas en el sótano de su casa y otras 4 fueron lanzadas a un río cercano a su vivienda.

Otro histórico payaso asesino fue Zozzaby, un payaso acróbata checo que vivió en Liverpool a finales del siglo pasado. Mató a varios niños que previamente violaba; acabó suicidándose. El impacto de sus hechos fue tal que incluso se creó una leyenda a su alrededor, asegurando que a día de hoy su espíritu continúa aterrando a los niños de la ciudad de los Beatles.

Todos estos estímulos sociales pueden fácilmente causar coulrofobia en cualquier persona que, a partir de ellos, cree una imagen sádica y perversa de la figura de los payasos. Ello explicaría mejor por qué algunas personas temen a los payasos y otras simplemente los ignoran.

Experiencias traumáticas

Una causa que está relacionada con todas las fobias del mundo. Se piensa, con mucho sentido, que una persona con miedo a los payasos posiblemente haya sufrido una experiencia traumática con ellos en el pasado.

Pongamos un ejemplo un poco exagerado. Supongamos que un día, cuando tenías 10 años, ibas caminando por una calle estadounidense y por accidente viste como John Wayne Gacy, disfrazado de payaso, asesinaba despiadadamente a un hombre. La experiencia seguramente será absolutamente perturbadora y como consecuencia desarrollarás un miedo irracional hacia todos los demás payasos del mundo.

Sin embargo, se han hecho algunos estudios en personas que padecen esta condición y un pequeño porcentaje no necesariamente tuvo que tener una experiencia traumática con payasos en su infancia u otra etapa de su vida. Su coulrofobia se debería a otros factores.

El maquillaje

Ya hablamos de la disonancia cognitiva, pero en este caso vamos a tratar un aspecto más específico. El maquillaje de los payasos. Los colores intensos como el rojo, sumados a una combinación de curvas inestables en todo el rostro (la sonrisa pronunciada y las cejas arqueadas, todas ellas excesivas) pueden generar un impacto en nosotros que haga que temamos a los payasos. Esto explicaría también por qué hay algunos niños que temen sentarse en el regazo de Santa Claus en los centros comerciales.

¿La fobia a los payasos es incurable?

Todo depende de la intensidad del miedo hacia los payasos y los motivos que la causen en el paciente. Hay cientos de casos en los cuales la persona se ha curado completamente de su fobia, pero en otras ocasiones es tan fuerte que ningún tratamiento médico o espiritual puede erradicarla.

Cómo superar el miedo a los payasos

Gracias a los avances de la psicología moderna, existen varias vías efectivas de tratamiento.

Tratamiento médico

En algunos casos se puede superar el miedo a los payasos con la ayuda de medicamentos. Tomar antidepresivos u otros fármacos que nos ayuden a mantener la calma en los momentos en los cuales estemos cerca de estos personajes es una solución. Este es el camino más corto, pero en ocasiones es el que menos resultados aporta al paciente.

Tratamiento cognitivo-conductual

Hasta la fecha, la mejor forma para superar la fobia a los payasos es la aplicación de tratamientos cognitivo-conductuales.(3) Estos métodos exponen al paciente a los payasos para que gradualmente vaya superando su miedo irracional hacia ellos.

¿Cómo se aplica? Una persona con suficiente voluntad podría realizarse este tratamiento por su propia cuenta. Sin embargo, debemos conocer nuestros límites y entender que cuando una fobia es demasiado intensa tenemos que recurrir a la ayuda de profesionales.

El tratamiento para combatir la fobia a los payasos puede ser complicado ya que está enfocado hacia un personaje y no hacia una situación, como lo son la claustrofobia o la acrofobia. En esta ocasión tenemos miedo a un determinado grupo de personas. Por ello la exposición a las mismas debe ser llevada a con mucho cuidado.

En los métodos actuales se utiliza la realidad aumentada para tratar la fobia en los pacientes más sensibles. En esta situación el paciente puede controlarse porque se trata de una simulación y no es parte de la realidad. Una vez que se adquiera suficiente tolerancia a las imágenes se puede proceder a llevar las cosas a un plano físico.