Trastorno histriónico de la personalidad

El trastorno histriónico de personalidad está definido como un desorden de la personalidad, se caracteriza por un patrón de búsqueda de atención excesiva. Por lo general comienza en la edad adulta temprana.(1)

Los individuos con personalidad histriónica presentan un continuo cambio de emociones y sentimientos. Son muy inestables emocionalmente y a causa de ello pasan rápidamente de la alegría a la tristeza, de estar dicharacheros a parecer melancólicos en un breve lapso de tiempo.

El Trastorno histriónico se produce cuando los rasgos propios del trastorno se hacen crónicos en la persona. Algunas personas pueden presentar rasgos de personalidad histriónica pero no por ello padecen el trastorno.

Este trastorno no debe confundirse con el trastorno límite de la personalidad, se trata de dos trastornos diferentes y de distinta gravedad. Si se conocen bien las características es fácil diferenciar ambos.

Las personas con Trastorno límite de personalidad, también conocido como trastorno borderline, tienen unos comportamientos mucho más extremos que pueden llegar a ser peligrosos para sí mismo o los demás.

Presentan incertidumbre sobre quiénes son en muchas ocasiones. Los intereses y valores que poseen cambian continuamente a raíz de ello.

Otro de los rasgos es que no aceptan que algo pueda tener aspectos buenos y malos a la vez o que pueda ser algo intermedio, ellos extreman las características siendo algo malo o bueno, blanco o negro.

A causa de su inestabilidad estas opiniones pueden cambiar rápidamente, una persona les puede parecer buena un día y mala al siguiente. A causa de estos cambios súbitos las relaciones se hacen intensas e inestables.

Estilo de conducta

El comportamiento de personas con este trastorno se reconoce por los siguientes rasgos:

Lo que más puede llamar la atención en el comportamiento de personas con trastorno histriónico de la personalidad es el gran dramatismo con el que afrontan los acontecimientos, llevando al extremo las emociones positivas y negativas.(1)

Además estas personas tienen un alto nivel de susceptibilidad, especialmente ante las críticas de otras personas.

Como ya se ha mencionado al comienzo, son personas muy inestables que pierden el control sobre sus emociones y presentan un estado de ánimo cambiante continuamente. Preocupadas por llamar la atención en todo momento.

Algunos individuos presentan una conducta “seductora” hacia otros, llevándolo al extremo. Dedican mucho tiempo a la seducción y necesitan sentirse queridos o deseados. Además, tienen problemas para discernir la intensidad de una relación, sintiendo muy cercanas relaciones personales que no lo son.

También tienen una preocupación excesiva por su imagen exterior y la imagen que proyectan hacia los demás. Buscan la aprobación de los demás continuamente y la confianza de los demás, conocido como síndrome de Wendy.

Suelen ser personas muy influenciables, dejándose llevar por las opiniones y consejos de otros sin tener en cuenta su propio pensamiento. Si tienen un fracaso o desengaño en cualquier ámbito de la vida, culparán a los demás de este.

Trastorno histriónico de la personalidad

Causas del trastorno de la personalidad histriónico

Las causas de la personalidad histriónica pueden ser diferentes, no existe una única causa para provocar el desarrollo de este trastorno. Más bien aparece por determinados factores externos e internos que influyen en la persona que lo desarrolla.(2)

La personalidad histriónica suele empezar a desarrollarse en la infancia, pero se hace evidente en la mayoría de casos durante la adolescencia.(2) En sí, se conoce de la existencia de dos factores que dan origen a esta patología, como son:

Los factores externos que influyen en la aparición del trastorno histriónico se dan por lo general en el núcleo familiar, con unos padres o tutores poco atentos y ausentes, con una carencia en pautas y límites. También sufrir abuso psicológico, desprecios y humillaciones influyen en la aparición del trastorno.

Los factores internos son aquellos rasgos propios de la personalidad del individuo. La autoestima baja, la insatisfacción y la inseguridad y no estar satisfechos con el físico pueden promover a que se desarrolle el trastorno.

Tratamiento del trastorno histriónico de la personalidad

Las personas que lo padecen no suelen buscar tratamiento hasta que presentan una depresión o ansiedad. Generalmente los afectados no perciben su conducta como negativa, no son conscientes de su trastorno por lo que la ayuda suele llegar por otros motivos.(3)

Cuando acuden a un profesional de salud mental es cuando se detecta el trastorno y cuando se ofrece una terapia adaptada a sus necesidades.

Generalmente se aplica tratamiento psicológico combinado con tratamiento psiquiátrico, este último resulta muy efectivo y es el más recomendado para estos casos.(3)

Es cierto que, debido a la inestabilidad, el mayor problema aparece a la hora de seguir el tratamiento por parte de los pacientes, que suelen ser inconstantes y abandonarlo relativamente pronto en un alto número de casos.

Cómo tratar con personas con trastorno histriónico

En la edad adulta, la convivencia con estas personas puede ser muy complicada. Si no se detecta y trata, las personas que conviven con ellas pueden verse afectadas psicológicamente.

Para poder convivir sin estos problemas con una persona con trastorno histriónico debemos tener en cuenta una serie elementos que ayudaran a saber cómo tratar a este tipo de personas.(4)

Aceptar la situación

El primer paso es aceptar que la persona tiene este trastorno, puede ser difícil y es posible que se tarde en aceptar la realidad. Una vez se acepta es mucho más fácil entenderlo y ser comprensivo con el tema.

Su comportamiento y la forma en la que enfrenta las situaciones no son capricho de la persona. Ésta no puede evitar que su comportamiento sea exagerado y teatral. Es la forma que tiene para expresarse y no conoce otra ni puede controlarlo.

Esta persona tiene gran dificultad para gestionar las emociones, así como percibe la realidad distorsionada, a causa de esto sufre mucho. Pero no hay que reforzar su actitud victimista.

Trastorno histriónico de la personalidad

Limitar

Una vez se acepta la situación, se aprende a gestionarla, esto pude hacerse por cuenta propia o con la ayuda de un especialista. El especialista puede ser muy útil para las personas que conviven con alguien que padece un tipo de trastorno.

El segundo paso es mantener la objetividad. Tratar a la persona con firmeza, cariño y respeto, poniendo límites y manteniendo la posición para ser respetados.

Es recomendable salir de una discusión o uno de los dramas con delicadeza, esperando a que la persona se tranquilice y dejando el tema para un momento en el que no esté alterada.

No entrar en su juego

Es importante saber cómo evitar que estas personas te metan en su juego. Es imprescindible no entrar en juegos psicológicos, manipulaciones o desafíos. Hay que tratarlas como a personas adultas que son aunque muestren conductas infantiles.

Si se entra en su juego estas personas ven reforzada su conducta errónea y será muy difícil que no las repitan. Por lo que aunque sea difícil en muchas ocasiones no verse envuelto en sus juegos, es importante mantenerse firme ante estas situaciones.

Reforzar la conducta positiva

Al igual que resulta beneficioso ignorar las conductas poco adecuadas, es importante reforzar las conductas adecuadas, por ejemplo cuando la persona demuestra madurez y comprensión hacia algo.

El refuerzo se puede hacer mostrando interés cuando la persona que sufre el trastorno está teniendo un comportamiento adecuado. También promoviendo con nuestras acciones que la persona se mantenga en el estado de tranquilidad que demuestra.

Mantener la seriedad

Para lidiar en momentos de tensión con individuos de personalidad histriónica es importante mantener la seriedad. Si se utiliza el sentido del humor en estos momentos la persona puede pensar que se están riendo de ella y puede empeorar la situación.

Mantener las distancias

Esto no quiere decir que no se tenga una relación cercana e íntima, más bien se refiere a que no nos dejemos llevar por sus halagos o desprecios.

Los cambios bruscos de estado de ánimo y la inestabilidad provocan que las personas con este trastorno vean a alguien como una persona muy buena en un momento, y al momento siguiente pueden verlo como alguien malvado. Por este motivo es mejor no tener en cuenta si nos halagan o no en momentos de extremismo.

El trastorno histriónico de la personalidad debe ser tratado por psicólogos y psiquiatras, si notas que alguien de tu entorno puede sufrirlo es mejor que lo consultes con un especialista. Existen un gran número de trastornos de la personalidad que pueden dar lugar a confusión, por ello el diagnóstico deberá realizarlo un experto en salud mental.

Ayudar a controlar que la persona que sufre el trastorno toma la medicación y sigue el tratamiento es muy importante para su recuperación.