Qué es el miedo escénico
Para aprender a perder el miedo escénico, lo primero que debes hacer es saber qué es este. Respondiendo a esta pregunta sobre qué es el miedo escénico: este es un estado psicológico de bloqueo en la comunicación con las personas que nos rodean debido a una situación de pánico o medio.
Nuestras capacidades comunicativas se ven extremadamente mermadas, de manera que no podamos expresarnos correctamente. En ocasiones, los individuos suelen manifestar coaliciones internas que impiden la articulación de palabras hacia al grupo a quienes se dirigen.
Lo cierto es que muchas personas a día de hoy sufren este pánico escénico, el cual puede manifestarse en múltiples situaciones. Hay personas que solamente sienten este pánico cuando tienen que enfrentarse a una situación como pueda ser una exposición oral en clase, una exposición de un trabajo, etc.
En definitiva, situaciones en las cuales la persona tiene que explicar sus conocimientos precisos sobre una determinada materia ante mucha gente. No tiene por qué tratarse de conocimientos precisos, el simple hecho de tener que hablar en público puede producir una situación de estrés en la persona bastante abrumadora. Esto resume bien el qué es un miedo escénico de carácter leve.
Pero hay personas, sin embargo, que sienten esta situación de pánico en otro tipo de ocasiones que son mucho más cotidianas, por lo que este pánico escénico empieza a ser un problema bastante grave y que debe tratarse. Este tipo de ocasiones de las que hablamos consisten en la simple presentación de personas, en el miedo que aparece a la hora de conocer gente nueva o de hacer amigos.
Esto es un problema grave porque cada vez que cambiemos de trabajo, de lugar de residencia, de clase si es que estamos cursando algunos estudios o de cualquier tipo de lugar a lo largo de nuestra vida, será una tragedia.
De hecho, algunas personas, para no tener que enfrentarse a esta situación, deciden no moverse jamás del sitio en el que viven. Esto es lo que se conoce como fobia social, algo muy diferente al concepto miedo escénico.
Por ello es un problema que debe ser tratado con la mayor rapidez posible para aprender a combatir el miedo escénico o a saber cómo superar el miedo escénico. No podemos bloquearnos cada vez que tengamos que dirigirle la palabra a alguien.
Sin embargo, también es cierto que mucha gente confunde un sentimiento tan común como la vergüenza como un trastorno.
Es un error de lo más normal. Por ello, ahora que ya sabemos qué es el miedo escénico, es extremadamente importante, a la hora de tratarnos, conocer los síntomas para poder identificar en qué punto nos encontramos y a aprender el cómo superar el miedo escénico.
Síntomas del pánico escénico
Ahora que conocemos qué es el miedo escénico, podemos centrarnos en la cuestión de cuáles son los síntomas del miedo escénico.
Debemos diferenciar tres grupos de síntomas. De esta manera, podemos encontrar una serie de indicios que se producen a nivel psicológico, otros que se producen a nivel fisiológico, y otros que inciden de manera directa en la conducta o el comportamiento de la persona.
En cuanto a los síntomas de carácter psicológico, el más común es el del inevitable bloqueo mental que sentimos y que no nos deja explicarnos correctamente.
Pero no solo está este, sino que además podremos sentir una sensación de que vamos a quedar mal de manera garantizada, encontramos que estamos más concentrados en todo lo que sucede a nuestro alrededor, tendemos a exagerar cualquier fallo que cometemos, nos sentimos confusos o aturdidos, no podemos concentrarnos, y empezamos a tener miedo.
Un miedo que se traduce, posteriormente, en una serie de síntomas fisiológicos.
Los síntomas a nivel fisiológico son la sensación de sudor extremo, una subida en nuestro ritmo cardiaco, un ligero dolor o molestia en la boca del estómago, enrojecimiento de nuestra cara, la sensación de que nuestra boca está quedándose seca, ganas irrefrenables de ir al servicio, escalofríos, inquietud, pupilas dilatadas, y por último ese molesto ‘’nudo en la garganta’’.
La molestia que produce el miedo y la ansiedad física que sentimos, llevan a experimentar cambios en nuestra conducta.
De esta manera, los síntomas del miedo escénico en la conducta son un bloqueo con la gente que nos rodea, ganas de tratar de escapar del tema que estás tratando, actos automatizados, una bajada en el volumen de nuestra voz, habla entrecortada, silencios incómodos, y el más peligroso de todos, esta situación puede animarnos a consumir algunas drogas que nos relajen o distraigan de este tipo de miedo.
¿Por qué tengo miedo a hablar en público?
Está claro por qué una persona puede tener pánico escénico. La realidad es que se trata de un tipo de trastorno de ansiedad, el cual deviene irremediablemente de la baja autoestima o la inseguridad que puede tener una persona determinada.
La inseguridad hace que estemos pensando, en todo momento, que lo que vamos a hacer será algo nefasto. La baja autoestima, asimismo, nos hace tener un temor incontrolable a mostrarnos de manera desenfadada ante cantidades grandes de personas por el sentimiento de vergüenza que produce.
Es clave conocer, en este punto, qué podemos hacer nosotros para combatir el pánico escénico.
9 claves para vencer y perder el miedo escénico
Existen claves eficaces que sirven para combatir el mismo. De esta manera, si quieres aprender a perder el miedo escénico, termina de leer este artículo con 9 claves que te ayudarán.
1. Aprende sobre el pánico escénico
Como bien hemos dicho antes, para aprender a combatir el miedo escénico es crucial saber qué es este. Por lo tanto, bebe bien de todas las fuentes que tengas al alcance de tu mano, y empápate de todo el conocimiento que puedas. Esta tarea hoy en día no es difícil gracias a internet.
2. Reparte el tiempo en tus intervenciones
Algo muy común cada vez que alguien tiene que hacer un speech o un discurso, se tenga pánico escénico o no, es esa sensación de que el tiempo pasa muy despacio. Sin embargo, está comprobado que fijarse unos epígrafes y dedicarle un tiempo determinado a cada uno de ellos hace que la sensación de lentitud desaparezca. Fija unos horarios para cada tema del que hables.
3. Sé consciente y cambia el chip
Cada vez que sientas que el pánico se apodera de ti, cambia de mentalidad. Cuando comiencen a venirte a la cabeza los pensamientos pesimistas de que todo va a salirte mal, recuerda que has estado practicando y que lo tienes todo bajo control, que, si todo el mundo puede hacerlo tú también puedes, e incluso mejor.
Confía en tus capacidades y podrás perder el miedo escénico.
4. Nunca dejes de practicar
Debes practicar antes de hacer la exposición. Si lo conocen todos y está aquí recomendado, será que es eficaz. Practica tu exposición una semana antes, unos días antes, e incluso en los momentos inmediatamente anteriores.
Verás como la seguridad en ti mismo va apoderándose de ti y que aprenderás a combatirlo.
5. Interactúa con quienes te escuchan
Tú también puedes poner nervioso al público, y además es una buena estrategia para ganar unos segundos extra de silencio y de tiempo perdido. Pregunta a tu público alguna pregunta complicada y espera un momento en total silencio, o una sencilla para que alguien conteste.
En cualquier caso, habla con el público que te escucha y podrás combatir el pánico escénico.
6. Súbete al escenario
Esto es muy eficaz junto al antes ya mencionado truco de la práctica. Y es que para perder el miedo escénico, podrías empezar por establecer una primera toma de contacto directa con el escenario, aunque no haya nadie delante de ti para escucharte.
Tienes que empezar a conocer el entorno que te rodea, y cuando estés ahí arriba practica el tiempo que necesites. Esto también hará que tu seguridad aumente.
7. Técnica para mirar al público
Una pregunta muy frecuente es ¿cómo miro al público? no mirar parece de mala educación y nos deja en una situación de vulnerabilidad, algo que puede aumentar el pánico escénico, y mirar a un punto fijo permanentemente queda algo raro, francamente. Por ello, una técnica que puedes usar es la del ‘’barrido’’.
No mires a nadie en concreto, así no sentirás que nadie tiene puesta la atención en ti, pero conduce tu mirada de izquierda a derecha del público, de derecha a izquierda, de más lejos a más cerca. Así parecerá que estás mirando, aunque realmente no lo estés haciendo.
8. Meditación
Antes de exponer, medita. Céntrate en tus emociones y trata de controlarlas, que no sean ellas quienes te controlan a ti, o de lo contrario el pánico escénico volverá y será mucho más difícil perder el miedo.
Esta es una buena técnica para combatir el pánico y para gestionar nuestras emociones en general.
9. Practica deporte
Si nos encontramos nerviosos en los días o momentos previos a nuestra exposición, algo que puedes hacer es realizar algún tipo de ejercicio. Durante el mismo se liberan una serie de hormonas, como las endorfinas, y se libera muchísimo estrés.
De esta manera notarás como la mayoría de síntomas se minoran y que poco a poco sabrás cómo superar el miedo escénico.
