El trastorno se produce cuando una persona está completamente convencida de que es superior a los demás, se compara continuamente con los demás y a los que ve inferiores. Esto hace que coloque a todas las personas en una categoría inferior a sí mismo. En resumen, una persona con este trastorno tendría una sobrevaloración del sí mismo, la cual, a pesar de las pruebas en contra, no es posible modificar.
Theodore Millon es uno de los psicólogos que más ha estudiado el trastorno narcisista de la personalidad. Según este psicólogo muchas personas muestran en algunos momentos de su vida comportamientos propios de este trastorno, pero como con todos los trastornos de personalidad, debe ser algo crónico para considerarse un trastorno.
Comportamiento de una persona narcisista
Todos nos hemos cruzado alguna vez con una persona muy arrogante, que se cree superior a los demás y se permite tratarlos con desprecio. Esta sea posiblemente una persona con trastorno narcisista.
Estas personas también creen que los demás deben cubrir sus necesidades y no entienden cunado no las cubren.
Se muestran indiferentes ante el bienestar de los demás, solo les preocupa lo que esa persona les pueda aportar.(1)
Cuando no se hace lo que piden o se les muestra una opinión contraria, entran en un estado de frustración y enfado desmedido.
En general, muestran grandiosidad en el comportamiento, creyéndose muy importantes. Tienen necesidad de ser admirados y muestran falta de empatía.
Se sienten únicos y especiales por lo que en muchas ocasiones se rodean de personas que a sus ojos son importantes o tienen poder.
Las personas con trastorno de la personalidad narcisista tienen fantasías recurrentes con el éxito en la vida, el poder, la belleza y el amor.(1)
Buscan la admiración de forma excesiva por parte de los demás y si no sucede se frustran, provocándoles envidia si otra persona tiene más atenciones. Y suelen creer que son envidiados por el resto de personas.
Algunos estudios han determinado que muchas personas narcisistas experimentan aburrimiento crónico y hastío cuando no consiguen tener toda la atención y ser admirados por los demás. Esto desemboca en sensación de vacío interno e incertidumbre sobre la propia identidad personal.
Gary Yontef, uno de los estudiosos que más se ha dedicado al estudio del trastorno narcisista de personalidad, ha comprobado que estas personas no tienen un sentimiento interno de seguridad e identidad que los empuja a buscar apoyo externo.
Son egocéntricos, se centran en su auto-imagen, quienes son y quienes creen ser no coincide. Únicamente se preocupan por la imagen que creen que proyectan.
Además no tienen conciencia sobre lo que sienten y no son realistas en cuanto a la imagen que tienen sobre las relaciones con los otros.
Debido a la necesidad de destacar y ser brillantes, no afrontan bien el fracaso y la desilusión. Las expectativas que tienen siempre son superiores a las reales y se sienten amenazados frecuentemente despliegan mecanismos de defensa.
Por lo general las personas narcisistas no van a las consultas de los profesionales de la salud mental, psicólogos y psiquiatras entre ellos. Pero sí que muchos pacientes son personas que conviven con individuos con esta afección.(2)
Causas del trastorno narcisista de la personalidad
Las causas del trastorno narcisista no se conocen exactamente, pero si se sabe que la genética juega un papel importante.
Las recientes investigaciones han descubierto las personas con este trastorno tienen anormalidades estructurales en el cerebro, en concreto se ha observado que presentan menor volumen de materia gris en una zona del cerebro: la ínsula anterior izquierda, relacionada con las habilidades sociales como la compasión, la empatía, regulación emocional y las habilidades cognitivas.(3)
Estas personas suelen ser hipersensibles de nacimiento.
Aunque el ambiente en el que la persona se desarrolla es fundamental para este trastorno.
Es posible que se desarrolle el trastorno si en el núcleo familiar siempre se aprueban las acciones del niño aunque no sean adecuadas.
Si se muestra una admiración desmesurada por la persona a la que nunca se le presentan ideas realistas con las que no esté de acuerdo.
Un trato extremista tanto premiando los buenos comportamientos o castigando duramente los malos en la infancia puede favorecerlo.
Ocurre también cuando en la infancia han sido sobrevalorados y elogiados por algo como la belleza o alguna capacidad excepcional con la que esté dotado.
Todos estos factores pueden influir en el desarrollo del trastorno pero serán variables de unos individuos a otros.
Tratamiento para el trastorno narcisista
En principio existen dos métodos para el tratamiento de este trastorno, el psicológico y el psiquiátrico.
El primer método que se suele utilizar es la terapia cognitiva-conductual.(4)
Esta terapia trata de cambiar los modelos de conducta y pensamientos hacia unos comportamientos más adaptativos, beneficiosos y saludables. Esto puede llevar mucho tiempo y en cada paciente se llevará de forma diferente.(4)
Las áreas más importantes en las que se centra la terapia son:
- Trabajar las habilidades sociales para aprender a relacionarse con los demás.
- Despertar la empatía y mejorarla.
- Hacer entender al paciente porqué tiene este comportamiento narcisista, causas y consecuencias.
- Enseñar al paciente a tener relaciones personales sanas y aprender a colaborar con los demás.
- Que aprenda a reconocer la realidad y enseñarlo a tolerar las críticas, los fracasos y las desilusiones.
- Enseñar a entender y controlar sus emociones, mejorar su autoestima.
- Que consiga ponerse metas realistas y reconozca las metas inalcanzables.
El otro método es la aplicación de medicación, no existen fármacos especializados para este trastorno pero ayudan los fármacos como ansiolíticos y antidepresivos utilizados para reducir la ansiedad, la depresión y el estrés por ejemplo.(4)
Cómo tratar a una persona de personalidad narcisista
La convivencia con una persona con este tipo de trastorno puede ser muy difícil, al igual que con una persona con otro tipo de trastorno de personalidad. Por ello es recomendable contar con la ayuda de un especialista.(4)
1. No dejarse influenciar
Debido a que para esta persona lo más importante y único es el, es aconsejable distanciarse emocionalmente procurando que su comportamiento y forma de tratarnos no condicione nuestra conducta.
2. Buscar otros apoyos
A causa de la falta de empatía seguramente no se interese por tus problemas ni por si estas enfermo o tienes alguna preocupación, por eso intenta contar con alguna persona de confianza más receptiva. Es posible que si le cuentas tus problemas a alguien con este trastorno lo tome como un signo de debilidad y puede llegar a humillarte o descalificarte. El apoyo con los familiares es importante para tratar este trastorno, ya que son las personas con mayor disposición que el paciente tendría durante todo el proceso de aceptación de la enfermedad y de su recuperación.
3. Valorar
Para poder convivir con una persona con este trastorno, hay que reforzar (a veces) su ego, reconociendo sus buenos actos o éxitos personales. No olvides que una persona narcisista no deja de ser una persona débil y con cierta necesidad de valoración.
4. Confrontar
Para que el narcisista haga un ejercicio de humildad es bueno delegar actividades familiares en otras personas o que deje pasar a alguien delante de él por ejemplo.
5. Tratamiento
Si recibe tratamiento terapéutico a cerciórate de que lo sigue y si ves que no lo está siguiendo avisa al especialista, no lo tapes pues le perjudicará a él y a ti.
6. Bajar a la realidad
Muéstrale sin enfrentarte a él que no es todo como cree, que existen datos y hechos que apoyan tu teoría y que hacen que no tenga una visión realista de los hechos.
7. Motivación
Los motivos que suelen llevar a las personas con trastorno narcisista de la personalidad a optar por un tratamiento son por lo general acontecimientos graves como fracasos en el trabajo o en la vida personal, también si la familia insiste.
Por ello si tienes un familiar que presenta estos rasgos, invítale a recibir tratamiento en el caso de que haya vivido un acontecimiento importante que le haya hecho plantearse la necesidad de ayuda.
Este será un momento de debilidad que aprovechar para que la persona sea diagnosticada y tratada por un especialista de la salud mental.
Por lo general las personas con este trastorno necesitan largos tratamientos ininterrumpidos puesto que su ego les hace pensar que todo lo hacen bien y provoca que no crean que necesiten ayuda.
El diagnóstico lo debe hacer un especialista y el tratamiento debe ser puesto por el especialista, en ningún caso de deberá automedicar. En estos casos que requiera de la medicación, la misma deberá ser indicada por un médico psiquiatra con experiencia en el ámbito del tratamiento a los pacientes con trastornos de personalidad.